Hotel Pythagorion

El hotel está situado a 3 minutos andando de la plaza Ominia y desde allí se llega en 15 minutos al centro de Atenas, plaza Monastiraki, la Acrópolis, el Museo Arqueológico y las calles Adrianou y Pandrosou. Las habitaciones no son muy grandes pero el hotel está muy limpio y te cambia las toallas diariamente. Lo peor es la ducha, hay habitaciones con plato y otras con bañera, y se cierran con una cortina de plástico que coge mucha humedad y huele un poco mal. El desayuno está bien, variado y con un exprimidor para hacerte zumo de naranja. Quizás un poco escaso en cuanto a bolleria y fruta. El personal es muy amable y además si reservas alguna excursión a algún otro lugar cómo Delfos o Meteora es uno de los hoteles que es punto de recogida. En general el hotel está bien en cuanto a calidad-precio y la zona no es nada peligrosa.

Es un hotel con habitaciones amplias, el baño es algo viejo pero muy limpio. Personal muy amable y desayuno normal. En mejor zona que otros en los que he estado y cerca de 2 paradas de metro. Para repetir

do y hospedandome en los Best Western, y desde luego con diferencia el peor hotel de todos, siempre he mirado esta cadena como garantia de calidad.
No es un 4 estrellas. El baño de pena, sucio y viejo, con una ducha que había que ponerse de lado para entrar.
El personal, estupendo, muy amables y cordiales.
La zona buena y bien comunicada.

El hotel no esta en la zona mas segura de Atenas pero si esta localizado en una calle con movimiento y entre 2 estaciones de Metro céntricas: Omonia y Metaxurgio. Aunque ir a Plaka caminando por Athina no se siente muy inseguro, las calles laterales no son recomendables. El servicio es amable y eficiente. El desayuno no esta mal como en otros hoteles de Atenas, solo no prueben el "zumo de naranja". Creo que por el precio, volvería a hospedarme ahí en una siguiente visita.

El hotel en sí está muy bien, lo único que ocurre es que la zona en la que está es un poco peligrosa. Sobre todo por la noche. Hay mucho inmigrante y personas tiradas por el suelo, además está muy sucia. En cambio, la habitación es grande, el desayuno está muy bien y el trato del personal es muy amable. No hablan castellano, pero sí inglés. La limpieza también es muy buena; quizás, la única pega sea el baño, que no es muy nuevo pero está limpio. Otra cosa positiva es que el metro está muy cerca y bien comunicado (pasan las tres líneas que hay en Atenas).